Todos hemos oído hablar de Morgan, el galés Henry Morgan, famoso y temido corsario del Caribe del siglo XVI. Pero el capitán Morgan del que te vengo a hablar no es un pirata, ni un corsario, ni tampoco nació en Gales. Sólo le unen a aquel famoso personaje, y al famoso ron, la zona del Caribe por donde solía navegar y su nombre de pila.
El «Capitán Morgan» como le apodan sus amigos y conocidos en el mundillo náutico es una de las celebridades más queridas de Hollywood, que siente auténtica devoción por el mar y la navegación desde su juventud. Sí, estoy hablando del gran Morgan Freeman, el actor ganador de un Óscar ® como mejor actor de reparto en la película «Million Dollar baby», de Clint Eastwood.
Muy lejos del Gales natal de su homónimo Henry Morgan, Morgan Freeman nació en Tennessee en 1937, fruto del matrimonio de un barbero y una empleada de limpieza. Nadie podría haber imaginado que aquel muchacho, alistado voluntariamente en la Fuerza Aérea de EE. UU. trabajando como mecánico y aspirante a una carrera como piloto, llegaría a ganar un Óscar y se convertiría en un experimentado marino, además de piloto de su propio avión privado y . Tras finalizar el servicio militar estudió arte dramático en Los Angeles. En 1966, un año antes de su debut sobre las tablas de un teatro en la función «Hello Dolly!», a los 29 años, durante unos días de vacaciones en Vermont, el joven Morgan descubrió el mundo de la vela a bordo de un barco de vela ligera, un Lightning 18

Fue amor a primera vista. Freeman quedó definitivamente enganchado a la vela. Así que tan pronto como pudo, al al año siguiente, compró su primer barco, un Holiday 28′, un pequeño day-sailer con el cual, durante muchos años, la familia Freeman exploró la costa oeste de EE. UU., desde el estrecho de Long Island hasta Nueva Escocia, Canadá.
Alberg 30′
La navegación no es ostentación: es pasión y desafío
– Morgan Freeman –
En el año 1979 Freeman trabajaba duramente por ver despegar su carrera cinematográfica. Recorría los teatros de Broadway interpretando pequeños papeles y aparecía en series de televisión donde tenía roles de secundario.
En otoño de ese mismo año, a bordo de su siguiente barco, un Alberg 30′ salió de crucero rumbo al Caribe, con el objetivo de explorar las Bermudas, con su esposa Jeanette, su hija Morgana y Zipper, el gato familiar, por toda tripulación.

Con una eslora de 9,23 metros ( flotación de 6.61) y una manga de 2,67, el Alberg 30, es un sloop de quilla larga con un calado de 1,31 m. Fue diseñado por Carl Alberg en 1962 y construido a partir del mismo año por el astillero canadiense Whitby Boat Works. Se produjeron más de 700 unidades, muchas de ellas en fibra de vidrio. Por sus características y apariencia, el Alberg recuerda a los antiguos veleros de madera de las décadas de 1940 y 1950. Gracias a su robusta construcción es un barco líder en el mercado de barcos usados de Canadá y América del Norte.
Durante el camino de regreso llegó el mal tiempo. El otoño marca, en esa zona, el final de la temporada de huracanes y se suceden las depresiones. Depresión o tormenta tropical, poco importa, pero el pequeño velero con la familia Freeman a bordo, se vió azotado por vientos de más de 50 nudos. Mal tiempo y velero pequeño no son una buena combinación.
«Aprendes algo sobre ti mismo»
En el interior de aquel pequeño barco la familia Freeman estaba totalmente aterrorizada.Quedarse adentro e intentar una comunicación por radio para solicitar un rescate que probablemente no llegaría a tiempo con aquella tormenta o salir a la cubierta y hacerse cargo de situación y gobernar el barco eran las dos opciones entre las que Morgan tenía que elegir.
Y optó por la segunda, ganándose el apodo de «Capitán Morgan» tras pasar unas doce horas ininterrumpidas al frente del gobierno de la embarcación luchando contra el viento y el oleaje. La familia Freeman llegó a Nueva York a finales de octubre de 1979, bajo una nevada nunca antes vista en esa fecha. Años después el actor describiría aquella travesía como un evento fundamental en la formación de su carácter. La perseverancia y la combatividad no lo abandonaron desde entonces, y, si hay un entorno donde la perseverancia es necesaria, afirma, es el cine.
«Sojourner» Shannon 38′
Sin duda aquella experiencia le empujó a cambiar de eslora y adquirió el que sería su siguiente velero, el «Sojourner» un Shannon 38 con aparejo ketch y quilla corrida.

El Shannon 38’ es una embarcación de 12 m y un desplazamiento de 8 toneladas, según diseño de Stadel & Son / Schultz & Associates, construida por el astillero Shannon, especializado en barcos muy marineros y muy personalizados, fabricados en pequeñas series, hechas a mano en EE. UU. , un astillero equivalente al mítico astillero Amel, orientado al mismo nicho de mercado de clientes exigentes con aspiraciones de navegación oceánica. A bordo del «Sojourner» la familia Freeman regresaría cada verano a las Bermudas. A bordo de este barco, en 1989, Morgan navegó hasta Sombrero Rock, al norte de of St. Martin.
Tiempos de gloria
1990 es el año que marca el éxito de Morgan Freeman con el éxito en taquilla de la película «Glory» (Tiempos de Gloria) que narra la historia del primer regimiento afroamericano que luchó contra los confederados durante la Guerra Civil americana.
También es el año del gran crucero para los Freeman, que se prolongaría, por más de 3000 MN, desde la costa de Maine hasta Granada, en el extremo sur de las Granadinas.
«Afrodesia» Shannon 43′
Tu vida no vale la pena hasta que hagas algo que desafíe tu realidad. Y para mí, navegar en alta mar es un verdadero desafío, porque es cuestión de vida o muerte
A medida que crecía el éxito, con películas como «Robin Hood», «Amistad», «Cadena perpétua»,«Deep Impact»,«Driving Miss Daisy»… Freeman se instaló a medio tiempo en Granada. Con el dinero que había acumulado hasta la fecha podría haberse comprado cualquier barco, pero según sus propias palabras, navegar no consiste en la ostentación. Navegar es pasión, desafío. «Si vives una vida de ficción», dijo Freeman en alguna ocasión, «tu vida no vale la pena hasta que hagas algo que desafíe tu realidad. Y para mí, navegar en alta mar es un verdadero desafío, porque es cuestión de vida o muerte».

Siendo fiel a la marca, adquirió en 1996 el «Afrodesia» un Shannon 43. El Shannon 43, diseñado por Walter Schultz, es un barco de 13,36 m de eslora, 3,96 de manga un calado de 1,45 . (2,62 en la versión de orza) y un desplazamiento de 5.500 Kg. al igual que su el anterior, elige un aparejo tipo ketch y la versión de quilla corrida, de menor calado, para explorar las islas con más libertad. Un barco adecuado para largas travesías e ideal para aquellos que desean vivir a bordo durante mucho tiempo. Un gran velero para largos viajes, con aparejo fraccionado, pesado y con un casco profundo, con los interiores rematados con ebanistería y tallas decorativas. El Capitán Morgan lo conservaría durante 20 años, a lo largo de los cuales se convertiría en un casco bien conocido en el sur de las Granadinas.

Muy apegado a Granada, conocida como la Isla de las Especias (es uno de los mayores productores del mundo de nuez moscada, además de canela o el jengibre) gravemente afectada en 2004 por el huracán Iván, Freeman estableció el Grenada Relief Fund, para ayudar a reconstruir la comunidad y contribuyó a su financiación con, entre otras cosas, un libro de cocina en el que celebridades como el mismo Freeman y más de 15 de sus amigos famosos, incluidos Hilary Swank, Alicia Keys, Michael Douglas y Tom Hanks, quienes contribuyeron con sus recetas caribeñas favoritas y compartieron sus historias personales acerca del Caribe y por qué es tan especial para ellos. A bordo del «Afrodesia» el Capitán Morgan exploró intensivamente el Caribe, llegando hasta Trinidad.
En 2008 sufrió un grave accidente de coche que le provocó secuelas crónicas, una fibromialgia y la pérdida casi total de la movilidad en su mano izquierda, motivo por el cual, desde entonces, lleva un guante de compresión que le ayuda a sobrellevar el dolor permanente.

Por ese motivo, al no poder confiar en su capacidad para gobernar con seguridad su barco, decidió poner a la venta el «Afrodesia» reservando íntegramente el producto de la venta para obras de caridad en Granada.
En noviembre de 2011, a la edad de 74 años, Freeman fue nombrado presidente de la Junta Asesora Honoraria del National Sailing Center & Hall of Fame.
«Soy un apasionado navegante, un hombre de aguas azules de pura cepa.»
– Morgan Freeman –
En 2019 compartió en una publicación de Facebook el significado de los aretes que lleva en cada una de sus orejas, relacionándolos con la tradición marinera de llevar algo valioso en caso de fallecer en un lugar extraño y de ese modo poder pagar un ataúd y su entierro.Pero del significado de los aros en las orejas de los navegantes, escribiré más adelante.

Morgan Freeman es un verdadero navegante que ha desafiado vientos, mareas y tempestades, sigue siendo un apasionado defensor de la vida en el mar y ha dejado una huella duradera tanto en el mundo del entretenimiento como en la comunidad náutica.

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