Un cuadro cada viernes: James John Wilson Carmichael «Un día ventoso en el Brill, cerca de Róterdam» 1860

Un día ventoso en el Brill, cerca de Róterdam

«A blustery day on the Brill, near Rotterdam» fue subastado en Christie’s. La obra se describia como “firmada y fechada ‘J.W. Carmichael / 1860’ (inferior derecha), óleo sobre lienzo, 24¼ × 43⅛ in. (61.6 × 109.5 cm.)”. El Brill es el nombre inglés antiguo de Brielle, una localidad portuaria en Holanda, en la desembocadura del río Mosa, cerca de Róterdam, un enclave muy conocido en la historia naval anglo-holandesa. Retrata una escena marítima en un típico día ventoso, con fuerte oleaje y cielo nuboso en el que vemos típicas embarcaciones holandesas de vela y barcos mercantes y pesqueros. El estilo de Carmichael suele mostrar contrastes entre la luz y el cielo tormentoso, con mucho movimiento en el agua. La pintura refleja tanto el interés de los británicos por los puertos holandeses (históricamente vinculados por comercio y guerra), como la pericia de Carmichael en captar atmósferas marítimas. Fechado en 1860, corresponde a su etapa madura. Esta obra sería un ejemplo de su especialidad: escenas navales en el mar del Norte, pintadas con precisión técnica (propia de un hombre de mar) y un dramatismo atmosférico muy característico del romanticismo inglés tardío.

James John Wilson Carmichael nació en 1799 en Newcastle upon Tyne, en el noreste de Inglaterra. Su pasión por el mar estuvo marcada desde la infancia, pues su padre trabajaba como carpintero especializado en la construcción de barcos. Siguiendo sus pasos, el joven Carmichael aprendió el oficio y pronto se embarcó en un buque mercante que navegaba por las costas de Portugal y España. Más tarde regresó a Newcastle, donde trabajó para la empresa Farrington & Bros., dedicada también a la carpintería y la construcción naval. Fue allí donde comenzó a mostrar un vivo interés por la pintura: los propios Farrington le regalaron su primera caja de colores, alentando así su vocación artística.

A los 23 años abrió su propio estudio en Newcastle. Compartía espacio con el paisajista Thomas Miles Richardson Senior, y justo al lado se encontraba la Academia de Artes del Norte, en cuya galería Carmichael expuso numerosas obras. Pintaba tanto al óleo como en acuarela, aunque sus motivos predilectos eran siempre los barcos. Sus marinas se distinguen por la luz vibrante y la sorprendente sensación de tridimensionalidad: cielos amplios que dominan la composición, unas veces despejados y radiantes, otras cubiertos por densas nubes de tormenta o por el humo de los cañones. Sus lienzos muestran desde fragatas majestuosas que reposan en calma en bahías soleadas, hasta navíos que se baten en violentas batallas navales, azotados por la furia de las olas. En muchos cuadros, una fortaleza, un faro o un edificio monumental en lo alto de una colina completan el horizonte, envueltos en una ligera bruma.

Buques de guerra atrapados en una corriente de resaca frente a Leith, con Edimburgo más allá
Otra obra del artista «Buques de guerra atrapados en una corriente de resaca frente a Leith, con Edimburgo más allá», Firmado y fechado indistintamente como «J.W. Carmichael/184?» (abajo a la derecha) Óleo sobre lienzo 68,3 x 101,9 cm (26 7/8 x 40 1/8 pulgadas), vendido en susbasta en Bonham’s por 14,080 libras esterlinas.

Aunque célebre por sus escenas marítimas, Carmichael también cultivó otros géneros. Pintó paisajes interiores, vistas urbanas, catedrales y monumentos, así como escenas arquitectónicas como la nave de la iglesia de San Pedro de Newcastle, representada con una atmósfera de calma y luz casi tangible. Sus viajes por Italia y Holanda ampliaron su repertorio: allí realizó vistas de ciudades, puertos y embarcaciones mercantes.

En 1847 se trasladó a Londres, donde se estableció en el barrio de Chelsea, lugar de residencia de numerosos artistas victorianos, entre ellos J. M. W. Turner. Desde entonces expuso regularmente en instituciones de prestigio como la Royal Academy y la Society of British Artists. También trabajó para el semanario Illustrated London News, que lo envió como corresponsal artístico al mar Báltico en 1854 para documentar la Guerra de Crimea. No obstante, también dedicó lienzos a escenas más tranquilas y memorables, como la partida del explorador James Clark Ross en su expedición a la Antártida.

En la última etapa de su vida, ya cercano a los setenta años, Carmichael se trasladó definitivamente a Scarborough, cerca de Newcastle, donde residió hasta su muerte en 1868. Hoy, muchas de sus pinturas se conservan en colecciones públicas y privadas, y pueden admirarse en museos y galerías de Londres y Newcastle.

Para saber más:

Wikiart: https://www.wikiart.org/es/john-wilson-carmichael
Artvee: https://artvee.com/artist/james-wilson-carmichael/
Wikipedia: https://en.wikipedia.org/wiki/John_Wilson_Carmichael


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